Episodio 77 Fidel Irizarry y Tejon, dos triatletas fuera de lo común

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La conversación con Fidel Irizarry fue una llena de sorpresas y risas. Su vida la define con un antes y un después, luego su primer triatlón. Evento que realizó movido por el pensamiento; si ellos lo pueden hacer, cualquiera lo puede hacer, como nos comenta;

el elemento necesario es la intención de querer hacerlo, cuando tu quieres hacer algo ya tienes un paso al frente»

A la fecha Fidel ha realizado 10 Half Ironman y 4 Full Ironman, además de un sin números de tríalos, entre otros eventos deportivos.

Para los que todavía no han explorado este deporte del triatlón, el cual ya es una competencia en los Juegos Olímpicos, les contamos que es un evento que consiste de nadar, correr bicicleta y correr a pie. Un evento retante que logra que lleves tu cuerpo al límite, para el cual hay que entrenar tanto física como mentalmente. Fidel nos cuenta que de joven practicaba el surfing, deporte típico de personas que viven cerca de la costa. Al formar una familia sus prioridades cambiaron como suele suceder. Una vez cumpliendo con el deber de sostener un hogar y encaminar a sus hijos, Fidel regresó al deporte. Ya adentrado en sus actividades deportivas decidió ser acompañado por su inseparable amigo Tejón, un perro Pastor Belga.

Cuando Fidel nos cuenta su historia y el desarrollo de su idea de incorporar a un perro como acompañante en la realización de este deporte, me quedé impresionada de la forma tan sagaz que utilizó para hacer esto posible. Como bien nos comenta, es ser diferente, es querer hacer algo que no se había realizado antes. Comenzó a desarrollar la idea pensando primero en cómo iba a lograr que Tejón comenzara a nadar en la dirección determinada por el evento, ya que la parte pedestre había sido más que probada en eventos anteriores. Fidel se las ingenió para entrenar a Tejón de manera tan exitosa que en su primera competencia logró terminar el recorrido antes que su amo.

Sus ideas innovadoras, su energía y entusiasmo lo llevan a continuar realizando eventos que reten su esfuerzo, es por esto que en su último tríalo utilizó una bicicleta peculiar para realizar el evento, una Penny Farthing o en español conocida como bicicleta de rueda alta. Cuando Fidel conoció esta bicicleta que forma parte de la evolución de nuestro vehículo de dos ruedas, quiso sentir lo que sintieron sus pasajeros hace 100 años atrás. La adquirió no solo para tenerla como pieza de arte sino para correrla. Nos confiesa que disfruta de ella más que de ninguna otra y por esto se propuso realizar el evento junto a ella. Pude observarlo montarse y correrla con gran aplomo y pude ver como logró incorporarla en su participación en el Tríalo de Rincón.

Está de más decir que para Fidel no hay imposibles. Descubrió como nos comentó durante la entrevista que:

por alguna razón humana, nosotros tendemos a pensar que no se puede, si dices que no puedes créeme que no vas a poder»

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